Una zagala solloza

mirando al fondo de un pozo

cuando aparece otra moza

diciendo con alborozo:

-¡Date priza Mari Paz!

ya eztá lizta la carroza

noz vamoz con loz papaz

a compraz a Zaragoza.

De Mari Paz la tristeza

Mari Luz se ha apercibido.

-¿Qué ez lo que te ha acontecido?

-pregunta con extrañeza.

-Hazme zaber la razón

de tan acerba zozobra.

la doncella rezongando

le responde con presteza:

-Tengo razones de zobra,

mi dezdicha ez tan atroz...

tan cien par, tan ezpantoza...

-¿Ce te ha pegado el arroz?

-Máz grande ez aún la coza.

-¿Te atacó el zorro feroz,

eza acecina rapoza?

-Muchícimo peor que ezo.

-¿Ce te ha caído en el pozo

tu bocadillo de quezo?

¿Haz perdido el albornoz?

Dame rezpuezta veraz

o te retuerzo el pezcuezo.

Con un hilillo de voz

se lamenta Mari Paz:

-¡Ay Mari Luz, Mari Luz!

¡Qué azunto tan azquerozo!

Lo que he perdido ez el cezo

puez me robó el corazón

un ceñorito andaluz

eztremadamente hermozo.

Dice la hermana:

-¡Qué cruz!

¡Qué incenzata cin razón!

no te faltaba maz que ezo

zo grandícima aveztruz.