|
|
|
|
Se jactaba un negro grajo de ser un gran personaje y exigía el homenaje de un gracioso renacuajo. −¡Ave soy de alto plumaje! -graznaba con desparpajo-. No hay grulla que me aventaje, ni grillo ni escarabajo. Y el renacuajo granuja esgrimiendo un estropajo que le regaló una bruja, frególe la lengua al grajo. Gritándole con coraje en en su voz grave de bajo: -¡Grosero fue tu lenguaje! ¡Calla, por siempre, espantajo!
|
|
|
|
|